Si huele a café da menos pereza levantarse al igual
que de una comida no te levantas hasta que te tomas uno. Las pausas del
trabajo no serían lo mismo sin él y si no existiera tendríamos menos
amigos porque qué sería de ese «¿Tomamos un café?».
Precisamente a eso, a tomar un café, nos fuimos para pedir consejo a los que más saben. Así llegamos a Dispar Café,
un pequeño espacio escondido en una callejuela de A Coruña que vive por
y para un producto que miman desde el principio hasta el final. Vamos a aprender a hacer café pero no tepreocupes porque no empezaremos la casa por el tejado: aquí leerás consejos para principiantes en un mundo que, seguro, seguiremos explorando.
«Mi historia con el café empezó cuando nací. Me crié recolectando café en Colombia donde mi familia se dedica a esa industria desde hace décadas», el que habla es Jean Z., dueño de Dispar Café.
Nació en Nueva York, se crió entre Estados Unidos y Colombia, estudió
en Madrid y el amor lo trajo hasta A Coruña. Aquí conoció a un gallego,
Adrián L., al que enganchó poco a poco: «La pausa del café siempre fue
mi momento favorito. Cuando conocí a Jean me empezó a embaucar, comencé a
investigar, a engancharme y ahora paso mis horas tostando y moliendo café».
Aquí solo hay café especial de Colombia. El hermano de Jean lo
selecciona allí y lo envía. «Llega en granos de color verde (la gente no
suele saber que es de ese color) y aquí lo tostamos y preparamos. Tostar es como cocinar, toda una ciencia».
Pero, ¿es posible preparar en casa un café de calidad sin gastarse un dineral en maquinaria y artilugios difíciles de utilizar?
«Claro que sí. La clave está en el café. Tiene que ser fresco, de
temporada, tostado en un tiempo óptimo y lo más importante: que esté en
grano», Jean nos da la primera lección así que tomad nota: nunca hay que comprar el café ya molido.
«En cuanto mueles el café solo tarda entre quince y veinte minutos en
oxidarse y, por lo tanto, en perder el 80% de sus propiedades». Así que lo primero que necesitamos es un molinillo, este es el primer salto para conseguir un café de calidad en casa. Para principiantes: molinillo de café manual Hario
Jean nos recomienda este molinillo perfecto a nivel introductorio.
Para principiantes. «Uno de los mejores en relación calidad-precio, sin
duda». Las muelas cónicas cerámicas de alta calidad muelen los granos
de café en partículas uniformes. Permite ajustar el tipo de molienda,
dosificar la cantidad y, lo más importante, es muy fácil de usar. Para profesionales: molinillo de café C40 Nitro Blade de Comandante
Hay que dar opciones y esta es para un nivel más avanzado.
Uno de los mejores, sino el mejor, molinillo manual del mercado. Con la
trituradora fabricada en acero inoxidable y una tecnología de triturado
única, el molinillo produce un molido extremadamente preciso y homogéneo. Lo malo: el precio. Primero practica con el otro molinillo y después tendrás tiempo para subir el nivel.
Una vez molido el café necesitamos una máquina para hacerlo y, para empezar (y seguir), no hay nada mejor que la clásica, mítica y siempre fiel cafetera italiana. Bialetti Moka Express
«Es la cafetera italiana original con los materiales idóneos para la extracción del café», en Dispar Café no dudan ni un momento
cuando les preguntamos por la mejor cafetera italiana. El diseño ha
permanecido prácticamente inalterado durante 80 años (fue patentada en
1933 en Italia) así que por algo será. La moka espress es el modelo más clásico y uno de los buques insignia de la marca. ¿El pero? No sirve para las vitrocerámicas de inducción.
Este es el modelo pequeño, para dos tazas. Si quieres una Bialetti Moka más grande esta es tu opción.
Buen café, un molinillo y una italiana. Con esos elementos y estos dos consejos que te vamos a dar ya no tienes excusa para no preparar el mejor café en tu propia casa.
«Hay dos cosas que casi todo el mundo hace mal a la hora de preparar
un café en una italiana», Jean va a corregir esos errores garrafales:
No precalentar el agua: error garrafal número uno. Hay que poner el agua en la cafetera italiana con una temperatura lo más cercana posible al punto de ebullición.
Dejar que el café se recueza: error número dos. Es muy fácil, en el momento en el que se empiezan a escuchar los primeros ruidos hay que sacar la cafetera del fuego.
Un consejo más: hay que ajustar bien la molienda. El café no debería ser más fino que el grueso de los agujeros del cacillo de nuestra cafetera.
viernes, 21 de septiembre de 2018
Las razones por las que deberías pasarte al café ecológico
El consumo de alimentos ecológicos aumentó un 24,6%
según datos del año 2017, una cifra muy significativa, y más si tenemos
en cuenta que es una tendencia que se mantiene desde hace seis años.
¿Por qué? Posiblemente porque el consumidor está comenzando a tomar
conciencia sobre los problemas medioambientales que genera una
producción excesiva y descontrolada de ciertos productos. Otros se
decantan por ellos porque contienen menos pesticidas y químicos.
Las
marcas se están poniendo las pilas en este sentido para satisfacer las
necesidades del consumidor con líneas que ofrecen este tipo de
productos. Un buen ejemplo es el de Honest,
que cuenta con tres variedades de café diferentes: Cappuccino, Mocca y
Latte. Todos se producen con granos de café 100% arábica que provienen
de Latinoamérica y que dan lugar a una bebida de sabor y aroma intensos.
Para los que no son amantes del café, la marca también se ha lanzado y
también ha puesto a la venta una gama de tés.
HONEST
Si todavía no te has decidido a hacerlo, enumeramos algunas razones por las que deberías animarte a probar el café ecológico.
Su producción respeta el medioambiente
Los
cultivos donde se produce este tipo de café suelen ser más respetuosos
con el medioambiente ya que habitualmente emplean fuentes de energía
renovables y se alejan de combustibles como el petróleo. Además, el
hecho de que se utilicen menos componentes químicos evita que los
vertidos que terminan en los ríos los contaminen o que el suelo los
filtre.
Supone beneficios para la salud de los granjeros
A pesar de que varios estudios todavía no han llegado a una conclusión
sobre la presencia de residuos de pesticidas en una taza de café, sí
que es verdad que son contundentes en lo que se refiere a los riesgos
para la salud de los granjeros. Los restos terminan en su piel, pulmones
y pies y, según un estudio de la Universidad de Reading
que recogió datos en una explotación en Jamaica, el 78% de los
trabajadores sufría dolores de cabeza, mareos o problemas respiratorios.
Todo ello relacionado con la falta de regulación del uso de pesticidas.
Tiene una mayor concentración de antioxidantes
Según un estudio de la Universidad de Newcastle publicado en el British Journal of Nutrition
los alimentos derivados de la producción ecológica contienen un mayor
número de antioxidantes que los convencionales, algo que podría
fortalecer el sistema inmunitario. Además, esta investigación concluía
que había una menor presencia de metales pesados.
Starbucks Corporation (cotizada en la bolsa NASDAQ) es una cadena internacional de café fundada en Washington (estado) (Estados Unidos). Es la compañía de café más grande del mundo, con más de 24 000 locales en 70 países. Starbucks vende café elaborado, bebidas calientes y otras bebidas, además de bocadillosy algunos otros productos tales como tazas, termos y café en grano. También ofrece libros, CD de música y películas.
El primer local con el nombre Starbucks fue abierto en Seattle, Washington en 1971
por tres socios: el profesor de inglés Jerry Baldwin, el profesor de
historia Zev Siegel, y el escritor Gordon Bowker. Los tres, inspirados
por el empresario cafetero Alfred Peet, abrieron su primera tienda de
venta de granos y máquinas para café, ubicada en el 2000 de la Avenida
Western, de 1971 a 1976.
Durante el primer año fueron clientes exclusivos de Alfred Peet para
luego comenzar a adquirir granos verdes de café de otros proveedores.
El empresario Howard Schultz se incorporó a la empresa en 1982, y después de un viaje a Milán,
propuso a sus socios ampliar la operación de venta de granos de café,
con la venta de café exprés y otros, lo que fue rechazado por éstos por
considerar que esta nueva actividad distraería el objetivo original de
la empresa, además estimaban que el café era algo que debía ser
preparado en el hogar.
Schultz abrió en 1985 su propia cadena de cafeterías con el nombre Il Giornale, tomando el nombre de un periódico publicado en Milán.
Un año antes, los tres dueños originales habían decidido comprar la
empresa de Alfred Peet, Peet's, y vender la cadena Starbucks a Howard
Schutz, quien a su vez decidió cambiar el nombre de su empresa Il
Giornale por Starbucks.
En 1987 la nueva cadena de cafeterías Starbucks abrió sus primeros locales en las afueras de Seattle y en Chicago. La empresa se incorporó a la bolsa de valores el 26 de junio de 1992, desde entonces las acciones han tenido un crecimiento sostenido alcanzando los 39 dólares en 2006. A partir de ese año la tendencia ha sido a la baja alcanzando el 2008 los 17 dólares.
Las cerezas del café se recogen y se secan directamente al sol. Se recogen las cerezas, se despulpan y los granos se dejan en tanques de fermentación de 13 a 16 horas, a continuación se lavan y se secan al sol.
Después del tueste, combinamos diferentes orígenes para que la suma de todos ellos resulte en un café único.
El grano se clasifica por su densidad en 3 categorías. Los mejores granos, con más densidad, se clasifican como "Grado I".
Las condiciones favorables para el correcto crecimiento del café, se dan entre los dos trópicos.
Al café se le puede sacar la cafeína antes del tueste mediante dos métodos: en el Método Natural se utiliza agua a muy alta temperatura.
sábado, 21 de octubre de 2017
Las 10 mejores cafeteras según el tipo de café que tomas
Su diseño
está orientado a conseguir la taza perfecta de esta infusión, ya sea
largo, aromático, en pequeñas dosis intensas o para ir de viaje. Esta es
nuestra selección de las que destacan en su especie
De mera bebida de supervivencia a producto de culto, el café
se ha convertido en fuente de especialización y también de bandos: los
que prefieren el ristretto italiano, los aficionados al café ligero y
generoso americano, los partidarios del aromático café natural, los
irredentos consumidores de torrefacto o los fans de las cápsulas han
dado lugar a un mercado en el que hay opciones para todos los gustos.
Estas son las cafeteras más destacadas de las disponibles hoy:
Moka de Bialetti: la madre de todas las cafeteras
La cafetera primigenia de la que derivan todas las demás, y el origen
del arquetipo "cafetera italiana" es esta de 1933, que forma parte de
las colecciones permanentes de varios museos de renombre de esos que se
citan continuamente. Hoy sigue siendo igual de efectiva que siempre, y
conserva su diseño casi intacto: el asa ya no es de madera, como en
origen, y el logo de Bialetti
va en el cuerpo superior y no en la base, como al principio, pero el
mecanismo por el que produce café es el mismo: el agua se calienta en el
depósito, pasa a través del filtro con café y llega al recipiente
posterior, cuando empieza a borbotear y ya está listo para tomar.
Cafetera Bialetti Moka Express.Foto: Amazon
¿Ventaja? Puedes emplearlo para cualquier tipo de café en
la cantidad deseada, aunque hay normas que puede seguir para obtener un
café canónico. Por cierto, si tiene cocina de inducción sepa que la
Moka también está disponible, pero el depósito inferior no es facetado,
sino curvo y de acero inoxidable.
Moka de Alessi: el 'plus' de diseño
La firma italiana Alessi
tiene una larga trayectoria a la hora de implicar a diseñadores de
renombre en la producción de objetos para la cocina que,
sorprendentemente, funcionan impecablemente, haciendo verdadero aquello
de que la forma sigue a la función. Esta es la última novedad de la
casa, y lleva la firma de David Chipperfield. Aunque está elaborada en
aluminio, el fondo de acero magnético permite emplearla también en
cocinas de inducción.
Parece una cafetera normal, pero la Moka de Alessi lleva la firma del arquitecto David Chipperfield.Foto: Alessi
Además de ser una variación sofisticada y arquitectónica
de la cafetera italiana clásica (véase la entrada anterior), incorpora
una innovación que es puro design thinking: la tapa es plana para poder calentar la taza durante el proceso de elaboración del café y evitar el cambio térmico.
Cafetera de prensa francesa de Le Creuset: más fácil, imposible
Si te gusta el café de prensa francesa es posible que tus amigos
italianos te retiren la palabra durante un tiempo prudencial, pero las
reglas están para romperlas, y hay algo reconfortantemente cálido en una
taza grande de café infusionado y ligero como el que producen estos
artilugios. El proceso es el mismo que para cualquier infusión: se pone
el café molido (en granos gruesos, preferiblemente), se añade agua
hirviendo (hágase con un hervidor), se remueve y se deja reposar durante
cuatro minutos antes de bajar el émbolo. Es perfecto para probar
variedades desconocidas y gourmet de café, porque este proceso conserva
matices y sabores que se volatilizan en el espresso.
Una cafetera de prensa francesa de una marca francesa.Foto: Le Creuset
Aunque hay cafeteras de émbolo en muchas firmas, hemos elegido esta de Le Creuset por lo original de su material (es cerámica de gres) y porque, como todo lo que produce la firma de la cocotte, funciona de maravilla y dura siglos.
Chemex: el discreto encanto de la artesanía
La cafetera Chemex es pura inteligencia 'mid-century'.Foto: Chemex
Esta cafetera de origen japonés es la piedra filosofal
del barista hipster. Al igual que la de prensa francesa, únicamente
requiere café molido y agua hirviendo, que se va vertiendo lentamente
sobre el café situado en un filtro cónico de papel desechable.
La clave aquí está en el molido del café y, sobre todo, en el ritmo
al que se vierte el agua. A mayor lentitud, café más cargado. A favor esta cafetera de Chemex
tiene su diseño imperecedero, de vidrio con una junta de madera, y que
su mecanismo es tan sencillo que resulta imposible que se averíe, salvo
rotura.
Bodum: café alquímico de ida y vuelta
Así a primera vista impone un poco, pero te aseguramos que el mecanismo de esta cafetera de vacío de Bodum
no difiere en lo esencial del de una italiana. El agua se calienta en
la esfera inferior (hay versiones con calentador eléctrico o mechero de
gas) y, mediante un proceso de vacío, va ascendiendo al recipiente
superior. Ahí es donde se echa el café molido, se remueve y se apaga el
fuego. Tras algunos minutos, el café desciende lentamente a la esfera
inferior, listo para tomar.
Parece una redoma de alquimista, pero es simplemente una cafetera (de Bodum).Foto: Bodum
Requiere un poco de tiempo y de atención, pero es más
fácil de utilizar de lo que parece y el café resultante –natural, con
cuerpo, aromático– y lo bonita que es la cafetera justifican tener que
empollarse el manual de instrucciones.
Aeropress: para puristas viajeros
Una cafetera de bolsillo, o la versión tecnológicamente compleja del vaso de papel.Foto: Aeropress
Este artilugio de Aeropress
es una cafetera de bolsillo o de viaje lista para llevar a cualquier
parte. En realidad, es una prensa francesa pero más pequeña e invertida:
se coloca encima de la taza, se echa café, se vierte agua hirviendo, se
remueve y se introduce el émbolo. El café cae directamente a la taza,
ensuciando lo mínimo y generando un líquido con todas las virtudes de
este tipo de procedimiento. Si la idea de tomar mal café estando de
viaje te produce escalofríos, hazte con una de estas, que además son muy
asequibles.
Smeg: Nostalgia de los 'diners' en los que nunca estuvimos
¿Te suena esa jarrita con la que, en las películas americanas, la camarera se pasea entre las mesas del diner?
Viene de cafeteras como esta, de filtro y por goteo, que es lo que el
común de los mortales entendía por "cafetera eléctrica" antes del
advenimiento de las cápsulas y las máquinas de espresso de uso
doméstico. Esta de Smeg
bebe, como todas las de esta línea de la firma italiana, de la estética
de los años cincuenta y sesenta, está disponible en varios colores y
funciona a la perfección. Ponga un filtro de papel, añada café y
disfrute de su jarrita durante un buen rato.
Una cafetera por goteo bonita, fotogénica y tecnológica.Foto: Smeg
Nespresso Creatista Plus: lo gourmet es esto
Los amantes del café en cápsulas sabrán apreciar esta golosina tecnológica cortesía de Nespresso,
la firma que puso en el mundo este modo de consumir esta bebida. Se
llama Creatista Plus y se dirige a los puristas, pero también a los que
disfrutan elaborando recetas cafeteras con la leche como protagonista.
Además de ser bonita y decorativa, se calienta en solo tres segundos,
tiene ocho niveles de textura y 11 ajustes de temperatura. Incluye una
jarra con boquilla diseñada para dibujar formas sobre la espuma del
latte, se limpia sola e incluye software para ir más allá del cortado de toda la vida.
El arte de la cápsula en todo su esplendor multiusos: Nespresso Creatista Plus.Foto: Nespresso
Philips Series 3200: todo en uno
Si te gusta la automatización pero no empatizas mucho con las cápsulas, Philips ha creado productos como esta cafetera
en la que únicamente tienes que introducir el café en granos para
disfrutar de cinco tipos distintos de preparación. La serie 3200 muele
el café y lo prepara automáticamente, y además tiene un sistema de
preparación de leche que se limpia de forma autónoma. ¿Su mayor virtud?
Poder emplearla con cualquier tipo de café en grano, y disfrutar de un
espresso en casa en pocos segundos.
Esta cafetera de Philips lo hace todo ella sola.Foto: Philips
Breville Barista Max: en casa como en ningún sitio
Una cafetera profesional –es decir, una como las de las cafeterías y bares–, pero para utilizar en casa. El encanto de Breville Barista Max
es su estética clásica, en acero inoxidable, y con todos los artilugios
y utilidades de una cafetera de altura. Además, muele el café
directamente, así que ahorra procesos y aumenta las posibilidades.
https://www.iecafe.es/es/
miércoles, 12 de julio de 2017
El consumo de unas tres tazas de café al día puede tener efectos beneficiosos para la salud ya que se asocia con un menor riesgo de muerte, según dos estudios que publica hoy la revista Annals of Internal Medicine.
Los investigadores de la británica Agencia Internacional de Investigación sobre el cáncer
(IARC) y del Imperial College de Londres observaron que ese consumo
está «asociado a un menor riesgo de muerte por cualquier causa, en
especial por enfermedades circulatorias y del tracto digestivo», según
un comunicado.
El café, del que se calcula que en todo el mundo se consumen a diario unos 2.250 millones de tazas,
contiene sustancias que pueden interactuar con el cuerpo como cafeína,
diterpenos y antioxidantes, cuya cantidad puede variar según la forma de
prepararlo.
El autor principal del estudio, Marc Gunter,
del IARC, indicó que debido a las limitaciones de la investigación no
están «en condiciones de recomendar a la gente que beba más o menos
café», aunque los resultados «sugieren que un consumo moderado no es perjudicial para la salud y que incorporar el café a la dieta podría tener efectos beneficiosos».
Los datos corresponden al mayor estudio realizado sobre los efectos del café en la población europea,
donde tanto su consumo como su preparación varían, desde el expreso
italiano al con leche en Reino Unido. Los expertos analizaron datos en
diez países de 521.330 personas de más de 35 años procedentes del
Estudio prospectivo europeo sobre dieta, cáncer y salud (EPIC).
Tras 16 años de seguimiento, casi 42.000
personas habían muerto debido a todo tipo de enfermedades, entre ellas
cáncer, problemas circulatorios y fallos cardíacos.
Los científicos estudiaron los datos,
realizando los ajustes adecuados con factores como la dieta o el
tabaquismo, y llegaron a la conclusión de que el grupo que consumía más
café tenía un menor riesgo de muerte, frente a los que no lo tomaban.
Sin embargo, la cuestión de con o sin cafeína no es
fácil de diferenciar, pues no pudieron excluir que los bebedores de
descafeinado sí hubieran consumido café con cafeína en diferentes
periodos de su vida.
En una muestra de 14.000 personas se
analizaron los biomarcadores metabólicos, los cuales señalaron que los
cafeteros «pueden tener, en general, hígados más sanos y un mejor control de la glucosa».
Gunter señaló que todos estos datos son
consistentes con otros obtenidos en estudios de Estados Unidos y Japón,
lo que les da «mayor confianza en que el café puede tener efectos
beneficios para la salud». No obstante, son necesarias nuevas
investigaciones para descubrir cuáles son los componentes del café que
puede proporcionar esos efectos protectores o potencialmente
beneficiosos.
El segundo estudio, de la Universidad del Sur
de California, concluyó que tomar café se «asocia con un mejor riesgo de
muerte debido a enfermedades cardíacas, cáncer, accidentes
cerebrovasculares, diabetes y dolencias respiratorias o de hígado».
Las personas que consumen una taza de café al
día eran un 12 % menos propensos a morir en comparación con aquellos que
no lo consumían. Asociación que es incluso más fuerte para los que
toman dos o tres tazas de café.
La directora del estudio Veronia Setiawan
indicó, en un comunicado, que esa menor mortalidad se presenta
«independientemente de que la gente beba café normal o descafeinado, lo
que sugiere que esa asociación no está ligada a la cafeína».
«No podemos decir que tomar café prolongue la vida, pero vemos que existe una relación», agregó.